A los indignados

Os miro y veo treinta años atrás, cuando nos indignaba perder un año de nuestra vida en un inútil servicio militar orientado al obedecer.Indignaba entonces que un partido prometiese no entrar en la OTAN para meternos de cabeza.Enfadaba que nos prometiesen 800.000 puestos de trabajo, para crear dos millones de parados.

Decían representar y defender a los trabajadores para topar con la primera Huelga General de la Democracia.Nos hicieron dudar del progresismo del nuevo rico, del pelotazo, de las alcantarillas del Estado, de la corrupción política.

Algunos de los que desde hace treinta años, día a día, luchamos contra la perversidad que significa la regresión de los derechos sociales, económicos y laborales defendidos por supuestos partidos de izquierdas, el movimiento de los indignados, nos abre la razonable duda de si realmente será el que continúe la permanente pelea de los movimientos sociales y políticos que les antecedieron.Han de saber que ni son los primeros, ni los mejores.

En esta tierra , que llegó a ver arder la Asamblea Regional, son muchos los que defendieron también causas justas.De la experiencia siempre se extraen conclusiones.La primera, no basta con protestar, hay que proponer.Y se propone desde la política. Se hace necesario identificar la afinidad para desde ahí participar y decidir.

Si el movimiento es fuerte podrás cambiar las cosas, si no dispones de fuerzas tendrás que buscarlas, aglutinar.Permitid que dude de las bondades prácticas de las buenas propuestas que no fraguan en una apuesta política.

Todo esfuerzo reclama resultado, el vuestro lo merece.

Este sitio utiliza cookies de Google y otros buscadores para prestar sus servicios, para personalizar anuncios y analizar las visitas en la web. Google recibe información sobre tus visitas a esta página. Si visitas esta web, se sobreentiende que aceptas el uso de cookies. Para mas informacion visite nuestra politica de privacidad.

Comprendo las condiciones.

EU Cookie Directive Module Information