La Asociación de Vecinos Virgen de la Caridad se ha convertido en el primer colectivo de Cartagena que acoge a una persona condenada por el juez a llevar a cabo trabajos a beneficio de la comunidad. Esta persona tiene un horario de trabajo de cuatro horas al día en el local social y lleva un libro de incidencias, dentro del control establecido por el organismo penitenciario.

Se trata de un hombre que, además del pago de una multa y de la retirada del carné de conducir, ha sido condenado por una sentencia judicial a efectuar 88 horas de trabajos a beneficio de la comunidad en una ONG o dentro del voluntariado. La asociación vecinal cartagenera, en base al convenio firmado por la Confederación de Asociaciones de Vecinos de la Región de Murcia con Instituciones Penitenciarias, ha solicitado que esos trabajos sean desempeñados dentro de la labor social que llevan a cabo hacia sus vecinos.

"Todas las manos que tengamos para trabajar nos vienen muy bien, pues no somos una asociación pasiva y, gracias a disponer una inquieta directiva, trabajamos a tope para nuestros vecinos", expresa el presidente vecinal de Virgen de la Caridad, Juan Gómez Ayala.