La Guardia Civil ha liberado en buen estado de salud a un vecino de Mazarrón de 29 años, de origen marroquí, quien estuvo secuestrado y por el que pidieron un rescate. La operación acabó con éxito tras su liberación y la detención de sus once captores, quienes fueron localizados en Lucena (Córdoba), Mazarrón y Torre-Pacheco.

Los once detenidos son de origen magrebí, tienen entre 24 y 48 años y fueron arrestados en la población cordobesa de Lucena y en las murcianas de Mazarrón y Torre Pacheco. La Guardia Civil les imputa, además de secuestro y asociación ilícita, otras actividades relacionadas con el tráfico de drogas, con antecedentes policiales.

La operación ha sido llevada a cabo por agentes de las comandancias de Murcia y Córdoba, bajo la dirección del juzgado de instrucción número Cuatro de Totana (Murcia), que ha ordenado el ingreso en prisión de seis de los detenidos.

El secuestro se produjo sobre las 13.20 horas del día 19 en la pedanía mazarronera de Casas Gallego, cuando la víctima transitaba junto a un amigo por el paraje Casas de Ginés, y fue introducido violentamente en un coche ocupado por cuatro personas, sin que los testigos presenciales pudieran hacer nada por impedirlo. La Guardia Civil tuvo conocimiento de los hechos un día después a raíz de que una de las personas cercanas al secuestrado comenzara a recibir llamadas telefónicas pidiendo varios miles de euros por la liberación.

Más de treinta agentes establecieron entonces el dispositivo de localización de Ahemed E. y constataron que parte de los miembros de la organización, ya desarticulada en su totalidad, se encontraba en Mazarrón y en alguna zona de la comarca de Cartagena, y la otra en Lucena (Córdoba), a donde trasladaron al secuestrado amordazado a un piso franco.

Tras obtener la autorización judicial, los agentes entraron en la vivienda y detuvieron a cinco personas, pero no encontraron a la víctima, quien había sido trasladada de nuevo a Murcia. Cinco días más tarde fue liberado en una zona próxima a Mazarrón, en buen estado.

Según las fuentes, esta organización delictiva tenía totalmente definidas las funciones de cada uno de sus miembros, muy violentos y que dificultaron las labores de localización y detención por las medidas de seguridad que adoptaban.