Ha sido el mes de las concentraciones ante la puerta del Palacio de Justicia y el de la trágica noticia de la muerte de Gregorio Javier, uno de los seis policías preso por el caso Cala Cortina. Cientos de personas han pedido a gritos la libertad de los encausados, sin recibir respuesta alguna. Las dos últimas concentraciones han sido las más emotivas, con presencia de los padres de Gregorio Javier. Las madres de ‘los seis’ elevaron al cielo globos blancos con sus nombres y el padre de Javier soltó una paloma.

Durante el mes de octubre, los familiares de los policías nacionales encarcelados por el caso Cala Cortina han organizado en la puerta del Palacio de Justicia de Cartagena todos los miércoles una concentración para pedir la libertad provisional de los mismos con una media de más de cuatrocientas personas.

Todo se ennegreció más cuando el día 13 se conoció de la noticia de la muerte de Gregorio Javier, Javi, como lo conocía los amigos. A su sepelio acudieron amigos, familiares… y compañeros. Estuvieron arropando a la familia y, como ellos comentan, indignados por la decisión de no poder honrar su cuerpo vestidos de gala. Tuvieron que ver como la Policía Local, en un gesto que les honra, se hicieran cargo de portar a  hombros el féretro y la formación de un pasillo con honor.

Las concentraciones de los dos últimos miércoles han sido más emotivas al estar presente los padres de Javi. Este pasado miércoles, entre lágrimas y gritos de libertad, las seis madres de los policías encarcelados elevaron al cielo globos blancos con sus nombres, y Guillermo, padre de Javi, entre lágrimas soltó una paloma blanca.