La Guardia Civil investiga las responsabilidades de los protagonistas en la trágica pelea entre marroquíes y gitanos que se saldó con un fallecido, dos heridos graves y uno leve. Tuvo lugar cerca de la discoteca ‘Caracas’, cuando el local ya estaba cerrado, en Los Alcázares en la madrugada del pasado viernes. La principal víctima es de origen magrebí, mientras que los dos heridos graves son de etnia gitana y vecinos de Santiago de la Ribera. Uno de ellos tiene perforado el pulmón por una hoz y otro puede perder un ojo.

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Los servicios sanitarios de çemergencias han atendido y trasladado al hospital a tres hombres, heridos durante una riña que se produjo a primera hora de esta mañana en la puerta de una discoteca de Los Alcázares. Uno de ellos ha muerto en el hospital "Los Arcos del Mar Menor".

El servicio de Emergencias 1-1-2 recibía, a las 6.25 horas de la madrugada de los pasados jueves a vienres, una llamada telefónica informando de una pelea con armas blancas en la puerta de la discoteca ‘Caracas’ de Los Alcázares, informando que había dos personas heridas y que los agresores habían huido. Al lugar se movilizaron ambulancias con personal sanitario de la gerencia de Urgencias y Emergencias Sanitarias del Servicio Murciano de Salud y del Servicio de Protección Civil y Emergencias del Ayuntamiento de Los Alcázares, las cuales trasladaron a dos personas al hospital de Los Arcos del Mar Menor y otra llegó por sus propios medios. Policías locales de Los Alcázares, San Javier y Torre-Pacheco, así como Guardia Civil buscaban en esos momentos a los agresores, que huyeron del lugar de los hechos en un turismo. 

Uno de los heridos, quien llegó al hospital en su coche, falleció en la Unidad de Cuidados Intensivos del centro y otros dos fueron atendidos por heridas de gravedad (pulmón dañado por una hoz en el caso de J.U.A., de 20 años de edad, y ojo y mandíbula destrozados en J.A.U.H., de 35), siendo trasladado uno a la Arrixaca y otro operado en Los Arcos. Hubo un tercer herido leve, que pronto fue dado de alta.

El alcalde de Los Alcázares, Anastasio Bastida, a la mañana siguiente, dijo en Onda Regional que se trataría de “una reyerta entre miembros de etnia gitana y los dueños del local”. Parece ser, ha añadido, que la discoteca, situada en un polígono industrial en la calle Severo Ochoa, “estaba cerrada y que la pelea se ha producido en la misma puerta”. La licencia como café-teatro es del 17 de abril “y nunca había ocurrido ningún problema”, de hecho, el Consistorio no tiene constancia de que sea un local conflictivo, dijo Bastida, quien lamentó lo ocurrido. El propietario de la discoteca Caracas, Khalid Lazaar, por su parte, desmintió ayer cualquier relación con el suceso. “Todo el personal y yo nos fuimos a las 5,20, como siempre, y no había nada raro», afirmó el empresario marroquí en su perfil de Facebook.

La Guardia Civil investiga ahora quien fue el autor de cada uno de los delitos cometidos (homicidio y lesiones) en el exterior de la discoteca. Para ello están recogiendo testimonios de testigos y de los propios protagonistas. Algunos son totalmente opuestos, como refleja un artículo publicado hoy en La Verdad (pinchar aquí), donde se recoge que una mujer afirma que la pelea la iniciaron los de etnia gitana, mientras que éstos afirman que habían 8 ó 9 marroquíes, que estaban consumiendo cocaína, lanzándoles piedras. También se investiga de dónde salió la hoz que causó la muerte de un marroquí y causó grave lesión en un gitano.