Domingo, Julio 07, 2024
   
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Un asunto de drogas y lágrimas

La fiscal pide una pena de cuatro años y tres meses de cárcel a un hombre que fue detenido por la Guardia Civil, ante quienes lloró, por llevar cánnabis y cocaína en La Azohía, mientras que la defensa, que lleva la letrada Ana Ruipérez, pide que sea absuelto porque no la llevaba para vender, sino que era para consumo para un grupo que celebraba una fiesta y había creado un fondo para adquirirla.


El 22 de julio de 2012, sobre la medianoche, la Guardia Civil interceptó a David C.S., quien se dirigía con su vehículo a la playa de La Azohía, encontrando que enel interior del bolsilo de su pantalón llevaba un paquete de tabaco con diversas cantidades de cánnabis y cocaína, cuyo valor en el mercado negro estaría próximo a los trescientos euros.

El joven fue acusado de un delito contra la salud pública y ayer se sentó en el banquillo de los acusados de la sección quinta de la Audiencia Provincial, donde negó que esa droga que portaba tuviese como destino el narcotráfico, sino que era para una fiesta organizada por un grupo de amigos.

Siete guardias civiles comparecieron después. Uno de ellos dijo que, cuando fue detenido, "reconoció que era para venderla a unos amigos en una barbacoa y se puso a llorar". Un amigo del imputado, por su parte, afirmó que unos quince amigos habían organizado una fiesta en un bar-chiringuito y crearon un fondo, con veinte euros cada uno, para comprar droga y bebida, encargándole a David, "como se le podía haber encargado a otro, ir a recogerla".

En las conclusiones, la fiscal mantuvo la petición de pena de 4 años y 3 mese de cárcel, más una multa de 800 euros, haciendo hincapié en que el acusado "dijo ante los agentes que la vendía" y que sólo "hoy, dos años después, aporta un testigo para su versión".

Por su parte, la abogada del despacho Ruipérez Abogados pidió la absolución, indicando que sí reconoció que adquirió la droga, pero para una fiesta privada de unos veinte amigos en un bar cerrado, "en la que todos, como se comprobó porlos cabellos, eran consumidores. Es una cantidad de droga cuyo valor no supera los 289 euros y que se compró con el dinero de todos los participants en esa fiesta".

 

 

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