La Federación Regional de Empresarios del Metal (FREMM) y la Asociación de Instaladores y Mantenedores de Instalaciones Contra Incendios, ADEIM, advierten de la presencia de individuos que sustraen extintores de comercios y comunidades de vecinos, tras hacerse pasar por operadores profesionales.

Estos ladrones alegan que se llevan las botellas a su taller para hacer la revisión rutinaria, además de cobrar por adelantado el servicio, en algunos casos. El hecho es más frecuente en negocios con personas mayores al frente.

Pese a encontrarse ante posibles hurtos, la asociación no ha detectado la existencia de denuncias ante la policía por parte de los afectados. “A nadie le agrada sufrir este engaño, pero los afectados suelen sopesar varias circunstancias, como es el valor económico, el tiempo que conllevaría ir a Comisaría e, incluso, tener que admitir el haber sido blanco de una estafa”, manifiesta Francisco José Carvajal, presidente de ADEIM, asociación que ha denunciado los hechos ante la Dirección General de Industria.

El procedimiento que vienen siguiendo los falsos profesionales es similar en los casos detectados. “Suelen personarse en un establecimiento cuando hay afluencia de público y el comerciante está ocupado, por lo que al intruso apenas se le presta atención; éste se acerca al envase para ver la marca, se identifica ante el comerciante como empleado de la casa identificada y se lleva el recipiente con la excusa de ir a recargarlo”, continúa detallando Carvajal, para quien este procedimiento podría encerrar presuntos delitos, como son hurtos, estafas y suplantación de identidad.

Recomendaciones para prevenir engaños

Para evitar sufrir engaños y posterior apropiación de los equipos, FREMM y ADEIM recomiendan a los usuarios de extintores tener un servicio de mantenimiento habitual y que, en caso de duda, llamen al número de teléfono indicado en la pegatina del equipo para cerciorarse. “Las empresas de ADEIM tenemos por costumbre avisar de nuestra visita con días de antelación por teléfono a nuestros clientes. Ésta es la mejor manera de no llevarse sorpresas y reducir el riesgo de sufrir una estafa”.

Las consecuencias de estos hurtos van más allá del delito, ya que el destino más probable de los recipientes sea su venta irregular a terceros sin haber pasado ninguna revisión, por lo que los extintores no estarían en condiciones óptimas de uso, con la consiguiente pérdida de seguridad en caso de incendio.

Desde ADEIM se recuerda que los equipos de prevención contra incendios se revisan una vez al año. Asimismo, se advierte a todos los usuarios que se debe facilitar el parte de mantenimiento actualizado en caso de siniestro, ya que “de no hacerlo, se pierde la protección”.