Quince de los dieciséis detenidos por la Policía Nacional en Los Mateos (Cartagena) pasaron ayer al juzgado de guardia de Cartagena, que decretó la libertad provisional de catorce, mientras que el restante tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital de Santa Lucía al sufrir, mientras estaba en el calabozo, una alteración en su estado que hacía temer por su vida. Hay otro detenido, que al ser menor de edad fue trasladado a la Fiscalía de Menores.

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Los letrados Ángel Cegarra, José Jorge Cantador y Juan José Paredes fueron los que asistieron a los detenidos. Trece de ellos aseguraron que sólo eran consumidores y que se encontraban en el salón de la vivienda consumiendo, pues es la zona de fumadero, mientras que otros dos son los antiguos propietarios de un inmueble que actualmente es propiedad del Banco de Sabadell. Queda por aclarar la situación del hombre que fue llevado al hospital al quedar 'ido' en el calabozo, quizás, según se barajó en un primer momento, motivado por el consumo de estupefacientes y la tensión de estar detenido. De momento, parece que no está clara la identidad de la persona que explotaba un punto de venta de droga en la que los agentes de Comisaría intervinieron diversas dosis de heroína y cocaína, además de objetos robados y dinero en efectivo.