La noticia de que Iván Negueruela deberá regresar a la dirección del Museo Nacional de Arqueología Submarina de Cartagena, tras la sentencia de la Audiencia Nacional, como avanzó este diario el pasado viernes, también ha tenido reacciones en partidos de la oposición de la ciudad trimilenaria como Izquierda Unida y Partido Cantonal.

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IZQUIERDA UNIDA-VERDES
IU-V de Cartagena se congratula de que, a través de sentencia judicial, se dé, en el caso de la sentencia de reposición en su puesto de Iván Negueruela, una nueva lección -nunca la última- a las obsesiones de los distintos gobiernos, que confunden las funciones profesionales y los méritos contraídos para el desempeño de responsabilidades de gestión en ámbitos profesionales públicos con la adscripción o repudio de determinadas ideas políticas.

Por esto mismo, la formación de izquierdas considera necesario que una vez que un funcionario público adquiere, a través de procedimiento de oposición carente de cuestionamiento alguno, una plaza de empleo público debe anteponerse el perfil de competencia profesional al de afinidad política.


PARTIDO CANTONAL
Varapalo de los tribunales a la Administración General del Estado. La sala de lo Contencionso Administrativo de la Audiencia Nacional dicta sentencia firme y definitiva en la que restituye a Iván Negueruela en la dirección del Museo Nacional de Arqueología Subacuática de Cartagena. Después de un largo proceso de apelación, el arqueólogo vallisoletano demuestra la improcedencia de su destitución al frente del Arqua ya que alcanzó este puesto por concurso público y no por designación directa de sus superiores en el Ministerio de Cultura.

El Partido Cantonal reclama por tanto al Gobierno de Mariano Rajoy la reposición inmediata de Iván Negueruela en su legítimo puesto del que, según demuestran los tribunales, nunca debió abandonar. Como director del Arqua con la plaza en propiedad, ya consiguió en su momento la ejecución de la nueva sede del Museo en el paseo del Alfonso XII del puerto de Cartagena, la victoria ante la alta Corte norteamericana sobre la propiedad española de las fragatas La Galga y El Juno naufragadas frente a las costas estadounidenses de Virginia o la posterior recuperación de los materiales expoliados por la empresa cazatesoros Odyssey. Una labor de reivindicación de la pertenencia de los restos de las naves españolas hundidas entre los siglos XVI y XVIIII de la que ha sido pionero y que abre un apasionante futuro al patrimonio cultural del Estado, en general, y a la sede del Arqua en Cartagena, en particular.

El doctor Iván Negueruela accedió a la dirección del único museo estatal de la ciudad en 1993. Después de trece años, en 2006, la entonces ministra de Cultura, Carmen Calvo, lo destituyó sin explicación alguna pero, ante una primera apelación, de nuevo fue repuesto en su puesto por orden del Tribunal Superior de Justicia de Madrid en 2009. Sólo unos meses después, otra ministra socialista de Cultura, Ángeles González Sinde, tomó la misma decisión que su antecesora y ha sido el recurso sobre esta segunda dimisión el que acaba de fallar ahora la Audiencia Nacional a favor de Negueruela. El Ministerio incluso ha sido condenado a pagar las costas del juicio. “La lucha de Negueruela sin ningún tipo de concesiones a los cazatesoros por la potestad del Estado sobre los galeones españoles hundidos a lo largo de los siglos ha abierto los ojos a muchos incluso en el proceloso mundo de la política”, en opinión del secretario general del Partido Cantonal, Celestino García Alfaro.

Iván Negueruela también mantuvo un arduo enfrentamiento con la que fuera consejera de Cultura del Partido Popular, Cristina Gutiérrez Cortines, por la altura del actual edificio diseñado por el afamado arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra. El arqueólogo también consiguió al final, pese a las trabas de la primera, que la nueva sede luciera como una de las construcciones más significativas del puerto de Cartagena.