La Orden de Santa María de España, que tiene su sede en Cartagena, y la Fundación de Victimología entregaron la Gran Cruz de la orden a tres personalidades de Colombia. Incluye GALERÍA DE FOTOS y VÍDEOS

El salón de actos de la UPCT, con el gran secretario de la orden, Juan Aurelio Bernal Ruiz, como maestro de ceremonias, acogió la entrega de la Gran Cruz de la Orden a:
- Ruth Stella Correa Palacio, ministra de Justicia de la República de Colombia, cuya distinción recogió Emilio Las Huertas.
- Alfonso Gómez Méndez, ex fiscal General del estado de la República de Colombia, cuyo galardón recogió la teniente coronel de la policía de Colombia, Yeny Calvo Olmos.
- Jorge Eduardo Gechem Turbay, senador de la República de Colombia.

El comendador de la Orden Santa María de España, Juan José Liarte, expresó que se creó este reconocimiento de la orden de la Estrella que se enfrenta a una sociedad "que admira el triunfo, especialmente económico, y que ha colocado los falsos ídolos del ego y del consumo, nosotros queremos decir 'no', no queremos admirar la riqueza ni que impresione el poder temporal, y sí el amor, la lealtad, la dignidad, el valor, la sed de justicia y la generosidad, es lo que admiramos nosotros y lo que queremos celebrar con ustedes".

A continuación fue Emilio José García Mercader, presidente de la Fundación de Victimología de Cartagena, quien se dirigió a los asistentes. "Este reconocimiento nació de forma humilde y que representa un conjunto de valores al servicio de personas que siempre han estado al servicio de los valores transcendentales de los seres humanos. Es un nexo entre países alejados para valorar a sus mejores y que, posiblemente, en unos años puede convertirse en el reconomiento más importante de Iberoamérica".

Entre los asistentes cabe destacar al vicecanciller de la diócesis de Cartagena, Diego Martínez Martínez, quien bendijo el inicio del acto y entregó la Gran Cruz a Gechem, junto al teniente alcalde Joaquín Segado, al rector de la UPCT (José Antonio Franco) y el comisario Alfonso Navarro, entre otros. El epílogo tuvo lugar con un vino de honor en el Casino de Cartagena.