Fue un error, pero que pudo traer más grandes consecuencias. Un hombre de Jaén ha figurado como imputado en una causa porque se llama igual que un acusado de robo con fuerza en San Pedro del Pinatar al que la Guardia Civil le pidió el nombre pero no el número del DNI. Luego la base de datos hizo el resto, pues apareció con los mismos nombre y apellidos otra persona que nada tenía que ver con el asunto y que estaba ingresado en un centro de Úbeda al sufrir esquizofrenia.

Lo primero que hay que resaltar es que el asunto de la confusión se ha resuelto esta semana ante el juez de Lo Penal número 2 de Cartagena, Álvaro Bellas, donde la abogada Esther Avilés Linares, quien lleva al acusado de oficio, acudió fechas atrás para comunicar la confusión que se estaba produciendo.

Todo surge en un asunto de robo con fuerza en San Pedro del Pinatar cuando una chica denuncia a su hermano, que es toxicómano, de forzar la puerta de su domicilio y llevarse un anillo. En el lugar se personaron agentes de la Guardia Civil, que toman el nombre del acusado (Juan Luis) y lo citan para que se presente en el juzgado de Instrucción de San Javier. Sin embargo, no apuntan el documento nacional de identidad.

A partir de entonces el asunto toma dos vías. El auténtico acusado se presenta en el juzgado para testificar, donde tampoco se comprueba su DNI por parte de ninguno de los presentes en la declaración, mientras que documentalmente es acusado otra persona con el mismo nombre que reside en Jaén, en concreto en un centro sanitario de la Junta de Andalucía en Úbeda, debido a que padece una esquizofrenia desde el año 2007. El personal de dicho centro, al recibir la comunicación, se alarman y tratan de demostrar que es imposible que la persona internada sea el autor, aportando todo tipo de certificados de que el día del robo estaba en el centro.

El asunto, sin embargo, sigue adelante y en todo el proceso el DNI que figura junto al nombre del acusado corresponde a una persona ajena a toda esta historia. La abogada Esther Avilés contactó con el centro de Úbeda, desde donde le enviaron los certificados y una fotocopia del DNI con la que pretende demostrar que la fotografía no se corresponde con la del auténtico acusado. El asunto lo traslada a Lo Penal número 2, donde finalmente se aclara la situación para tranquilidad de todos, cortando una cadena de errores que pudo haber tenido peores consecuencias.

Anteayer, día fijado para alcanzar una posible sentencia de conformidad, se presentó el auténtico acusado. La Fiscalía le solicita una pena de diez años de cárcel y, aplicando varias atenuantes, acusación y defensa ven posible dejar el castigo en tres años y medio por un delito de robo con violencia, pero Juan Luis no acepta, por lo que el magistrado Álvaro Bellas fija la celebración del juicio para el mes de enero próximo.