La guerra contra los ladrones de chatarra y cobre apunta a nuevas reformas del Código Penal. La venta del contenido de los cables tendrá una nueva tipificación penal, pero además se plantea que las empresas de chatarra no puedan comprar a particulares.

Las noticias de los robos en el cableado de alumbrados son habituales en los últimos tiempos, ocasionando grandes trastornos y elevados gastos a vecinos e instituciones, situación que ha llevado al ministro del Interior, Jorge Fernández, ha reformar el Código Penal en este asunto, por lo que las personas que sean descubiertas con material de cobre robado serán acusadas de un delito y no de una falta, como hasta ahora. Además, según ha podido conocer Cartagena de Ley, se estudia prohibir la compra de chatarra a particulares para bloquear la salida de los objetos metálicos que son sustraídos.

Las zonas rurales son donde se producen principalmente estos robos, por lo que hay satisfacción entre los agricultores, como apunta Vicente Carrión, presidente del sindicato agrario COAG. "Es muy importante que la responsabilidad penal alcance a estos ladrones". Además, señala que, al igual que ocurre con los robos de frutas y hortalizas, no basta con establecer duras penas, "hay que controlar con eficacia el destino de ese material sustraído".