Les pillaron con cocaína en el turismo y, después, en su domicilio. Ayer confesaron ante el tribunal de la Audiencia y serán condenados con penas de cárcel, aunque no tendrán que entrar en prisión. Fuencisla Martín de Oliva y Pascual Martínez Martínez son los abogados que han llevado la defensa.

La historia viene de largo, pues fue el 24 de agosto de 1998, poco antes de la medianoche, cuando se inició. El acusado José C. G. se dirigía en un turismo Opel Corsa a Los Narejos, donde había quedado para entregar droga a Francisco V. J. y Milagros J. G. Tras el traspaso de la cocaína, abandonaron la localidad de Los Alcázares, pero fueron interceptados por la policía. Llevaban 100,73 gramos de cocaína, lo que en el mercado negro hubiera supuesto cerca de doce mil euros. Al día siguiente, el juzgado número 1 de San Javier acordó la entrada en el domicilio de José en Cartagena y en dos viviendas de María C. R. Z. en Torre-Pacheco. Apareciendo tres bolsas con más cocaína, también valorada en torno a los doce mil euros. Además, otros doce mil euros aparecieron en metálico.

Ayer, ante el tribunal de la sección quinta de la Audiencia Provincial, integrado por José Manuel Nicolás, Miguel Ángel Larrosa y Fernando Fernández-Espinar, confesaron su culpabilidad, requisito imprescindible para que el acuerdo alcanzado entre la fiscal y los letrados de la defensa (Fuencisla Martín de Oliva y Pascual Martínez Martínez) pudiese elevarse a sentencia

Dicho acuerdo, además de la multa, contempla que José y Milagros serán condenados a año y medio de prisión, mientras que la pena queda en un año para Francisco y María del Carmen. Sólo esta última tiene antecedentes (fue condenada en 1998 por otro delito de drogas), por lo que los tres primeros no entrarán en prisión y María ha solicitado la suspensión de su pena.