Un hombre, de origen marroquí, ha sido absuelto por la Audiencia Provincial, en Cartagena, de haber agredido sexualmente y causado lesiones a su vecina. El tribunal considera que las diferentes versiones de la mujer, las declaraciones de los testigos y el informe forense salvaguardan la presunción de inocencia del acusado.

• Anexo. Sentencia.

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“Él quería..., pero me negué y me dio un palizón de miedo”

En los testimoniios de la víctima concurren circunstancias que permiten "dudar de su veracidad", indica el tribunal en su fallo, en referencia a las diversas manifestaciones que ha efectuado durante el proceso. Por ejemplo, indica que la versión ante la policía fue totalmente diferente a la que llevó a cabo en el juicio. En la primera declaración, el 5 de febrero de 2009, afirmó que entró en la vivienda, donde habían ocho hombres, que la forzaron y violaron en el suelo, sin saber si había sido penetrada cuatro o cinco veces, consiguiendo acabar con esa situación gracias a la intervención de sus amigas, quienes vivían enfrente de esa vivienda. Al día siguiente, también ante la policía, aseguró que entró en el domicilio junto con otra amiga y participaron en una fiesta con doce personas conocidas, y que luego se marcharon, quedando ella en la vivienda, donde fue agredida sexualmente sólo por un hombre. También apuntó que cuando despertó estaba sola en la casa. Entonces afirmó que se dedicaba a la prostitución, pero que no mantuvo relaciones sexuales consentidas.

"Posteriormente, en fecha 7 de febrero de 2.009, prestó declaración ante el Juzgado de Instrucción en la que dijo que la verdad de lo ocurrido era lo que dijo en su segunda declaración policial y no en la primera, añadiendo que en esa primera declaración estaba aturdida. Y, finalmente, en el plenario, vino a sostener, en esencia, la misma versión ofrecida ante el Juzgado de Instrucción, es decir, que cuando ella se dirigía a salir de la casa el hoy acusado se lo impidió, procediendo éste a tirarle del pelo y a golpearla y forcejear con ella, hasta que perdió el conocimiento. Y cuando se le preguntó la razón por la que dijo ante la Policía que la habían agredido tres o cuatro hombres contestó que porque perdió el conocimiento y no sabía bien lo que había pasado, añadiendo que no sabía en ese momento quien la había violado. Y añadió que no sabía si el acusado la había violado o no porque ella perdió el conocimiento y que lo único que podía decir es que él la golpeó. Y cuando la defensa le preguntó sobre las diferentes versiones ofrecidas en la causa, ella contestó que ella no había dicho que todos le hubiesen hecho algo y que quedó inconsciente y no sabía quien la penetró o eyaculó encima de ella", reza un párrafo de la sentencia, antes de indicar el tribunal que no concurre, en modo alguno, la persistencia en la incriminación, además de que el aturdimiento "no justifica un relato tan detallado ni tan alejado de su posterior versión".

Por su parte, los testigos apuntaron que mantuvo relaciones esa noche, consentidas, con el acusado en la cocina de la vivienda a cambio de 50 euros. El informe forense tampoco encontró hemorragia, desgarro, herida o irritación genital alguna, por lo que el tribunal, integrado por José Manuel Nicolás Manzanares, Matías Soria y José Joaquín Hervás, absuelve al acusado de ambos delitos, dando la razón a la defensa, representada por la abogada Ana Julia Martínez Devesa y la procuradora Soledad Para Conesa.