La Memoria 2010 de la actividad judicial en la Región de Murcia, que esta mañana ha presentado el presidente del Tribunal Superior de la Región de Murcia, Juan Martínez Moya, al presidente de la Comunidad Autónoma y que después ha dado a conocer a los medios informativos, refleja una continuidad sobre el ejercicio anterior en  la imparable tasa de litigiosidad (quizá un poco más contenida) y el impacto de la crisis económica en la misma.

También refleja el crecimiento de la planta judicial y, por tanto, la elevación de la ratio juez por habitante; el avance en infraestructuras (edificios judiciales) y en tecnologías de la información y comunicación; la dimensión institucional y de gobierno del Tribunal Superior de Justicia, y, en definitiva, el compromiso de la
Justicia con la sociedad. "Pero, contiene también importantes novedades, como la implantación del nuevo modelo de oficina judicial, que iremos desgranando en esta presentación pública", asevera Martínez Moya.

El cierre de esta presentación, como fue el del año pasado, comprende las mismas dos ideas: un deseo y un compromiso. El deseo de contribuir todos a la
mejora del sistema de Justicia. El compromiso del esfuerzo, de trabajar de buena gana, como corresponde, por principio, a todo servidor público.

"Como presidente, como juez, no hay nada que nos duela más que los retrasos. Por eso, con esfuerzo, con actitud positiva, con trabajo, trabajo y trabajo
trataremos de alcanzar una justicia de calidad y sostenible. Probablemente en tiempos de crisis el esfuerzo, el trabajo como servidores públicos, se erige en arma letal para combatirla".