Estas palabras fueron vertidas, durante el sepelio civil de Francisco Marín, por parte del delegado del Gobierno en la Región de Murcia, Rafael González Tovar, pero sólo fue una muestra de las frases que sus amigos le dedicaron. Todo fueron palabras cargadas de cariño, plagadas de recuerdos y con un sinfín de elogios para “una gran persona que ha dejado una gran huella".

“El cerebro no da para entender lo que ha pasado, pero en el corazón se nota la lanza de dolor. No era superable en el servicio público ni en el esfuerzo hacia los demás. Quería abrir una sociedad cerrada (la cárcel) para fundirla con otra abierta. Paco seguirá en esta sociedad mientras quede una persona que le haya conocido”. Rafael González Tovar, delegado del Gobierno en la Región de Murcia.

“Un día muy triste. Paco no está pero su familia debe saber que ahora nosotros somos su familia. Un gran servidor, profesional, persona y amigo. Creía en la justicia y en la humanidad”. Mercedes Gallizo, secretaria general de Instituciones Penitenciarias.

“Desde la sencillez, humildad y desde el sentimiento de su generosidad. Es una despedida a medias, Paco se va en el plano biológico, pero se queda para siempre en nuestra memoria. Nos deja su obra, su trabajo y sus proyectos, que hay que intentar culminar”. Juan Francisco Pérez Avilés, letrado.

“Era la persona que cuando la cosa estaba mal ponía la nota optimista en el grupo. Era una persona respetuosa, de una gran tolerancia. Para los socialistas es una pérdida de la que tardaremos mucho en reponernos”. Antonio Martínez Bernal, secretario general del PSOE en Cartagena.

“Un honor, orgullo y placer haber trabajado contigo. Cualquier iniciativa tenía tu respaldo. Varios ex internos han estado aquí esta mañana, eso demuestra tu trato con todos, funcionarios, voluntarios y como anfitrión de visitantes. Hace dos años despedíamos a Guillermo y ahora a tí. De la misma forma te digo: Gracias por tu ejemplo”. Antonio Jábega, compañero en el centro penitenciario.

“Voy a hablar a un amigo, Paco Toni (así lo llamaba), de treinta años de amistad sincera”. Manuel Llamas, compañero en Sangoenra.

Estas frases fueron sólo un ejemplo del recuerdo que quedará de Francisco entre todos los que le conocían.