El Juzgado de Instrucción número 4 de Cartagena acogió la vista oral contra un hombre acusado de una falta de Maltrato a Animal por provcocar la muerte de su perro durante la celebración de una maratón este pasado verano en Portmán.
Según uno de los policías que han denunciado los hechos, fueron los propios corredores de la maratón los que les informaron de que uno de los participantes llevaba un perro que parecía que no podía seguir corriendo. “El perro no podía más. Iba por detrás, del cansancio, se cayó al suelo y el dueño lo animó, dándole golpes. Reaccionó, siguió corriendo y ya a unos 200 metros, aproximadamente, cayó al suelo y murió”. Según corredores de la maratón, que no fue citado al juicio, “aproximadamente a un kilómetro de la meta, el perro no aguantó y se desplomó en el suelo”.

El acusado, P. L., corredor habitual y aficionado a acudir a maratones con sus perros, asegura que la organización de la carrera fue muy mala, que el perro no pasó por ningún tipo de control y que, además, la policía que se encontraba allí no le ayudó. “Fueron los propios corredores los que me dieron agua para el perro; la policía no me ayudó". En la sala continuó diciendo que, tras parar por primera vez, "el perro fue andando y después fue cuando cayó al suelo”. El acusado aseguró que animal tenía sus controles veterinarios en regla y que se encontraba en perfecto estado de salud antes de participar en la carrera.

“En este tipo de carreras, en las que los corredores pueden ir con su perro, están obligados a que el perro vaya por delante de ellos, para que no se produzcan estos hechos”, declaraba uno de los policías.

La Fiscalía, ante el informe veterinario y sólo contar con las declaraciones de la policía y del acusado, decidió retirar la acusación al carecer de los elementos necesarios para calificar los hechos como maltrato animal.