Nadie nos ha dicho lo contrario, lo que sí es verdad, es que hace dos veranos tuvimos una reunión con el sr. director general de Seguridad, puesto designado por el anterior equipo de gobierno, acompañado por dos oficiales locales. Todo hasta ahí muy bien, no sin antes, reiterarnos en la concertación vía telefónica por su respectiva secretaria que si tenía que ser a una hora, a otra hora, que si por la mañana, que si por la tarde, ahora le llamamos, después le volveré a llamar… vamos que como director general que era, consideraba casi lógico ese tipo de filtros.

En fin, lo que sí es verdad, es que hasta hoy en día, las peticiones que desde la asociación de vecinos le decíamos siguen igual:
El mantenimiento de las señales horizontales, están abandonadas, no tiene mantenimiento alguno, líneas continuas de prohibido aparcar, borradas, otras en curva hechas de forma particular, totalmente prohibidas, pasos de peatones, zonas de colegios y escuela deportivas, den la necesidad de pasos elevados y/o guardias durmientes, limitaciones de velocidad en las principales vías de acceso y circunvalación del barrio, más presencia policial para que de alguna forma no permitir el acceso de vehículos rodados en dirección prohibida, ya de modo habitual, aparcamientos en doble fila, motos sin identificar y con un ruido máximo dando vueltas por las calles del barrio, así como ser conducidas por niños de 6 y 7 años.

En definitiva, lo que de esa reunión de hablo, transcurridos ya dos años no hay nada de nada. Lo que sí es verdad es que el oficial Méndez es la única persona que se preocupa realmente en ese aspecto por el barrio, por lo que aprovechamos estas líneas para agradecerle su participación.

Coches abandonados, talleres de mecánica clandestinos, se utilizan las calles y bajos particulares para ejercer su trabajo, obras ilegales, bajos clandestinos destinados para el hacinamiento de animales, de todo esto existe documentación registrada y denunciada tanto en la concejalía de sanidad como en orden del día de la reunión que se mantuvo con el citado señor director general de seguridad.

Una de nuestras mayores sorpresas ha sido lo más reciente, que es el mantenimiento de las señales horizontales, que una vez más, pasan por el repintado de la calle cabrera, olvidándose por completo nuestro ya tradicional barrio de ‘las 600’.

¿Qué pasa con nuestro barrio?, ¿por qué no pasan dentro?, nos preguntamos, ¿es que nos tienen miedo hasta para el mantenimiento de las señales de tráfico?

Que pena es vivir en un barrio.
Que preciosa avenida han hecho para salir de la ciudad dirección Las Tejeras, La Palma, Murcia, etc. Sus coches, autobuses, van de aquí para allá, que preciosa, con rotondas, pero que casualidad, siempre se olvidan de los ciudadanos de a pie, de los vecinos y vecinas que vivimos en esos barrios que la modernidad devora.

¿Es tan difícil sentirse ciudadano de a pie y así poder utilizar las infraestructuras que se hacen en los barrios?

¿Por qué decimos esto? Muy sencillo, quien diseñe el barrio, las zonas en definitiva donde determinan que se tienen que poner farolas, señales de trafico verticales y horizontales, aceras, jardines etc., los técnicos, no lo utilizan, dan como terminado el trabajo, pero... no pasa nada.

Después, los vecinos y vecinas somos los que tenemos que utilizarlos, pero también es verdad, ellos viven normalmente en zonas muy bien dotadas de ese tipo de infraestructuras.

Déjense caer por ejemplo por la nueva avenida Víctor Beltri, que bonito, que entrada y salida mas preciosa, oh pero... han pasado por ahí, incluso en coche, pues no digamos si se desea pasear por sus aceras.

Primero, si tienen la desgracia de vivir en una de las barriadas limítrofes y se quieren desplazar a José María de la Puerta, lo tienes que hacer a un kilómetro del mismo, bien por la zona de un establecimiento de comida rápida o por la acera dirección al barrio porque no hay ningún paso de cebra entre punta y punta.

Si por casualidad bajas de la rotonda de la zona ITV hasta el centro comercial, estos señores han dejado las señales de trafico verticales tan bajas que incluso estando colocadas en medio de las aceras, tienes que ir con cuidado porque te das con ellas en la cabeza.

En definitiva, señores que disponen y hacen toda las infraestructuras para el Ayuntamiento o en la consejería de Obras Publicas, siéntanse de vez en cuando ciudadanos consumista y prueben como los cocineros hacen lo propio antes de sacar un plato a consumir y/o utilicen lo que han hecho y así verán los múltiples horrores que hacen para los vecinos.