22 de marzo, Viernes de Dolores, día grande de la ciudad y por tanto día de la Patrona de Cartagena. Veo con estupor que van a abrir al público algunos comercios del centro y como no podía ser menos, las grandes superficies. Tal parece un día normal de una semana normal. Me hago a mí mismo las preguntas, porque no tengo a quién hacérselas:

¿Dónde está la sensibilidad de la Primera Autoridad y su cohorte?

¿Dónde está la oposición?

¿Dónde están los Hermanos Mayores de las diferentes Cofradías?

¿Porqué se consiente esta ofensa a los cartageneros?

¿Dónde está nuestro orgullo?

¿Qué nos lleva a esta sumisión?

Vil metal que deslumbra y compra voluntades.