Los propietarios de tres vehículos a los que les cayó encima la pared de una nave reclaman los daños sufridos, pero entre el propietario de la edificación y el arrendatario que la utilizaba no hay acuerdo sobre quién es el responsable, por lo que será el juez de Primera Instancia número 4 quien tenga que resolver.

La pared de una nave cayó encima de tres vehículos que estaban aparcados en el exterior, dos de los cuales quedaron en siniestro total y en el otro tuvo que acometerse una importante reparación. El dilema está en quién fue el responsable. El propietario acusa al arrendatario por acumular sobre esa pared una cantidad excesiva de cereales, mientras que el segundo proclama que la estructura de la nave que alquiló estaba defectuosa.

Ante el juez Romualdo Fauria, el letrado de Mapfre, Rafael Escudero, defendió los intereses del arrendatario, mientras que el abogado de Groupama, Ignacio de la Peña, representó al propietario. Por su parte, los propietarios de los vehículos reclamaron los gastos a través de los abogados Alberto Truque y Manuel Fernández Martínez. El primero reclama el pago de la factura de la reparación que tuvo que acometer su cliente en el turismo, mientras que la abogada solicita el importe de los vehículos de sustitución que adquirieron sus dos representados al quedar los suyos en siniestro total.

La reclamación se efectúa contra el propietario y contra el arrendatario de forma individual o solidaria.