La empresa estadounidense Odyssey ha presentado esta semana ante el Undécimo Tribunal de Apelaciones de EEUU un informe contrario a la orden judicial de un juez de Tampa (Florida), del pasado mes de diciembre, para entregar a España el tesoro de la fragata 'Nuestra Señora de las Mercedes', cuyo destino sería el Museo Nacional de Arqueología Submarina (Arqua) de Cartagena. También anuncia que acudirá al Supremo de EE UU si no le dan la razón.

El tesoro de medio millón de monedas de oro y plata fue descubierto y recuperado del fondo del Atlántico en 2007 por la empresa estadounidense, que bautizó la operación como 'Cisne negro'. Después acudió a un tribunal de Florida solicitando su propiedad, pero el gobierno español presentó los documentos que demostraban que se trataba de una fragata de la Armada que se hundió en combate contra la flota inglesa el 5 de octubre de 1804 frente a las costas del sur de Portugal, por lo que defendió que son patrimonio histórico, además de ser la tumba de más de 250 marinos y ciudadanos españoles que murieron cuando la Mercedes explotó. También denunciaron que Odyssey llevó a cabo los trabajos en secretos porque sabían que se trataba de una fragata española, por lo que se aplicaba el derecho de inmunidad soberana que otorga el derecho a una nación a proteger su patrimonio histórico.

“Es un buque de guerra de España y que tanto los restos del naufragio como la carga del buque son parte del patrimonio cultural de España”, declaró el magistrado Steven D. Merryday, de Tampa (Florida) en su resolución de hace seis meses. Ahora Odyssey ha acudido al Tribunal de Apelaciones y España dispone de un mes para responder a ese informe.

Odyssey Marine Exploration ha avanzado que si el Tribunal de Apelaciones tampoco le da la razón, acudirá a la Corte Suprema de EE UU.