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La actuación llevada el martes por los agentes de la Comisaría de Cartagena en Los Mateos es un ejemplo más del trabajo que se lleva a cabo a través del Grupo de Estupefacientes hacia la venta de sustancias ‘que causan daño a la salud pública’, es decir, las drogas. El garito estaba regentado por un nuevo ‘capo’ de este negocio y llevaba poco tiempo activo. Atacar ambas facetas es una de las premisas marcadas por la Comisaría, “desde que accedí al cargo ya comenté a los agentes que hay que tratar de que los puntos de venta de droga no lleguen al mes”, dice Ignacio del Olmo, pues así se evitará que enraicen y vayan aumentando su clientela. “Ese reto lo tratamos de llevar a cabo también en verano, época en la que aumenta el consumo, aunque la venta es más itinerante que en el resto del año”..
Del Olmo proclama que mientras haya consumidores “habrá vendedores de droga” y que muchas veces se cierra uno y enseguida se abre otro, pero lo que no quiere es que ante la sociedad “exista sensación de impunidad, hay que evitarlo, pues la seguridad no es sólo cuestión de estadísticas, sino también de sensaciones y para ello hay que trabajar tatno en la prevención como con las intervenciones”.
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