Un hombre de origen marroquí, para quien se piden siete años de cárcel por un intento de homicidio, puede ‘irse de rositas’ en este asunto porque la víctima ha sido expulsada a Marruecos por su situación irregular en España, lo que extraña que se llevase a cabo porque esta persona también estaba imputada en esta causa, pues respondió a los navajazos del agresor con puñetazos en el incidente que tuvo lugar en la Nochevieja de 2011 en San Pedro del Piantar. La teoría de la Ley señala que si está pendiente de enjuiciamiento no se puede llevar a cabo la expulsión.

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Compuestos y sin la principal víctima. Aunque el tribunal de la sección quinta de la Audiencia Provincial planteó la posibilidad de celebrar el juicio recurriendo a las declaraciones que Benramdame efectuó en su día en el cuartel de la Guardia Civil y el juzgado, la opción se desvaneció enseguida pues la sentencia hubiese estado condenada a su anulación en un posterior recurso, como confirmaron los abogados defensores, Jorge Cantador y Eduardo Forte.

Así, el principal imputado, Abdelmalek, para quien se piden siete años de cárcel por clavar en diversas ocasiones un cúter al anteriormente mentado, se marchó del Palacio de Justicia con la misma sensación que la de todos los agentes jurídicos presentes, es decir, que muy posiblemente el juicio no llegue a celebrarse.

Benramdame fue expulsado por su situación irregular en España en base a la Ley de Extranjería y por un expediente de la subdelegación del Gobierno de Lugo (Galicia). Lo extraño es que se le embarcase en el ferrys de Ceuta rumbo a la frontera de Marruecos y nadie se diese cuenta de que tenía un juicio pendiente, en el que era víctima y acusado. Lo normal es que ahora no quiera dejar su país y regresar a otro donde podría ser condenado.