La Guardia Civil ha detenido a diez personas, entre las que se encuentra un menor, por el robo de más de cuatro toneladas de sandías en el campo de Cartagena. A cinco de los acusados se les atribuye también un delito contra la salud pública porque las sandías que sustrajeron de una finca experimental de Pozo Estrecho no son aptas para el consumo.

Se ha recuperado una tonelada y media de sandías tratadas genéticamente y valoradas en 44.000 euros, procedentes de una finca experimental de Pozo Estrecho.

La primera de las actuaciones se inició en junio, después de que agentes de los Equipos ROCA, especialistas en la prevención de los robos en explotaciones agrícolas y ganaderas, tuvieran conocimiento de diversos daños cometidos sobre fincas experimentales de cultivo de sandía.

Colaboración con Policía Local de Cartagena

La Guardia Civil, en colaboración con la Policía Local de Cartagena, dirigió las pesquisas al entorno de estas fincas dedicadas al estudio y tratamiento experimental de variedades de sandía, las cuales, al tratarse de ensayos agrícolas, no son aptas para el consumo humano.

Los indicios obtenidos llevaron a los investigadores hasta una vivienda de los extrarradios de Cartagena, donde fue localizado un vehículo cargado con sandías, las cuales han sido reconocidas sin ningún género de dudas por los propios técnicos agrónomos de la empresa, por lo que se ha procedido a la detención de cinco personas, una de ellas menor de edad, como presuntas autoras de los delitos de robo y contra la salud pública.

Sandías no aptas para el consumo humano

El resultado de esta investigación se ha saldado con la aprehensión de 1,5 toneladas de sandías, cuyo valor asciende a 44.000 al tratarse de productos de ensayo, tratados genéticamente durante años de estudio. Por la empresa a cargo de las investigaciones agrícolas se ha procedido a su destrucción.

Robos en Fuente Álamo

Otra de las investigaciones, desarrollada por la Benemérita para la persecución de los delitos cometidos sobre las explotaciones agrícolas y ganaderas, se inició a finales del mes de junio, cuando los investigadores tuvieron conocimiento de la sustracción de más de dos toneladas de sandías en una finca de Balsapintada-Fuente Álamo.

Las inspecciones oculares realizadas sobre la finca determinaron, además, los cuantiosos daños ocasionados sobre las plantas, por valor de 1.800 euros, lo cual han derivado en la pérdida completa de la cosecha.

Las indagaciones se dirigieron hacia los mercadillos y puntos de venta de productos del campo fuera de los cauces comerciales legales, donde se averiguó la identidad de los vendedores habituales de este tipo de mercancía.

Fruto de estas pesquisas, la Guardia Civil ha localizado y detenido, durante los últimos días, a cinco personas presuntamente relacionadas con los robos investigados.

Las operaciones realizadas por la Guardia Civil en relación con los hechos delictivos cometidos sobre explotaciones agrícolas y ganaderas se han saldado, por el momento, con la detención de diez personas, una de ellas menor de edad, como presuntas autoras de delito de robo, cinco de ellas además por su presunta relación en delito contra la salud pública, así como con la recuperación de una tonelada y media de sandías experimentales.

Los detenidos, las diligencias instruidas y los efectos recuperados han sido puestos a disposición de los Juzgados de Instrucción de Cartagena.