* Los detenidos facilitaban domicilios para empadronamientos ficticios y de esta forma obtener los informes favorables de los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Cartagena

* La red sobre la que ha actuado la Policía Nacional de Cartagena la componían cinco personas de nacionalidad marroquí, que han sido detenidos

* Los solicitantes de la reagrupación familiar tenían que abonar 400 euros a los detenidos para conseguir su empadronamiento

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La Policía Nacional ha detenido a cinco ciudadanos de nacionalidad marroquí, integrantes de una red dedicada a la falsificación de documentos para la obtención de permisos de residencia y favorecimiento de la inmigración irregular.

La investigación se inició el pasado mes de noviembre, al tenerse conocimiento de la presentación de un elevado número de solicitudes de reagrupación familiar o renovaciones de éstas, todas correspondientes a ciudadanos marroquíes, y en las que siempre se hacía constar como residencia habitual  determinados domicilios de la ciudad de Cartagena.

Los agentes pudieron constatar que los investigados presentaban contratos de alquiler por periodos de un año de duración, empadronándose inmediatamente, los solicitantes de residencia en los domicilios supuestamente arrendados, para a continuación pedir al Instituto Municipal de Servicios Sociales la emisión del Informe de Adecuación de Vivienda.

Hacer constar que el R.D. 557/11 por el que se desarrolla la Ley de Extranjería, tras la reforma de 2009, establece la necesidad de informe de adecuación de vivienda para la obtención de autorizaciones de reagrupación a favor de familiares o renovaciones de éstas, pudiendo ser éste emitido por la Corporación local en la que el solicitante tenga su lugar de residencia.

Tras materializarse visita de los Servicios Sociales y emitido el preceptivo informe, éste era presentado en la Oficina de Extranjería junto con la diversa documentación requerida.

En todos los casos, una vez que por parte de la Delegación del Gobierno se autorizaban las residencias, los propietarios de los inmuebles procedían a dar de baja a los “ficticios arrendatarios” y en breve espacio de tiempo, en ocasiones incluso al siguiente día, se procedía a realizar un nuevo contrato de alquiler a otros inmigrantes, iniciándose nuevamente el proceso fraudulento con el empadronamiento y la emisión del Informe de Vivienda.

Por los trámites se cobraba a los ciudadanos marroquíes cantidades próximas a los cuatrocientos euros. Si bien éstas pueden no parecer excesivas, sí proporcionaban un importante lucro a los propietarios, al arrendar éstos las viviendas hasta cinco y seis veces al año.

La operación culminó la pasada semana, habiendo sido detenidos cinco ciudadanos marroquíes por presuntos delitos de falsedad documental y favorecimiento de la inmigración, continuándose gestiones por parte de la Brigada de Extranjería y Fronteras de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Cartagena, a fin de localizar nuevas “viviendas patera” utilizadas exclusivamente con la finalidad descrita.