El juicio contra dos argelinos acusados de traer inmigrantes a la costa española, y que habían sido expulsado en varias ocasiones, no se pudo celebrar al marcharse a Francia un testigo protegido y se ha fijado la fecha del 13 de marzo para su celebración.

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Todas las partes estaban en la sala de vistas de la Audiencia Provincial, en Cartagena, dispuestos a iniciar la vista oral (no hubo acuerdo para una sentencia de conformidad), pero un testigo protegido, y considerado importante por acusación y defensa, no estaba. Resulta que se había marchado unos días antes a Francia y ha dejado indicados sus dirección y número de teléfono. Tras solicitar el auxilio judicial internacional, se ha quedado con recoger sus declaraciones por video-conferencia el 13 de marzo, fecha que se ha fijado para celebrar el juicio.

La Fiscalía solicita penas de seis años de cárcel para cada acusado, mientras que las defensas, que representan los abogados Miguel Belmonte y Lucía Cobacho piden que sean absuelto, alegando que no forman parte de organización alguna para traer inmigrantes y que es normal que intenten una y otra vez venir a este país para vivir mejor que en el suyo. En el caso del imputado sobre el que pesan siete expulsiones del país, su abogada expone que esos viajes se han llevado a cabo entre 2007 y 2012, lo que refleja que son puntuales y no como parte de una organización.