La Escuela de Prácticas Jurídicas de Cartagena inauguró ayer el nuevo curso con la presencia de una veintena de alumnos en el salón de actos de la UNED, donde se llevó a cabo el acto de inauguración, para a continuación comenzar con las clases.

La Escuela de Prácticas Jurídicas surge de la Fundación San Isidoro, creada por el Ilustre Colegio de Abogados de Cartagena y la Universidad Nacional de Educación a Distancia, con el objetivo de que los nuevos licenciados en Derecho aumenten su capacidad para integrarse en el mundo profesional.

El acto estuvo presentado y dirigido, ante la ausencia de un director de la Fundación en la actualidad, por los tres secretarios: Miguel Fernández, Antonio Navarro y José Manuel Cubillas, quienes serán los coordinadores del curso.

Explicaron que, posiblemente, "éste sea el último curso con el actual formato", pues para el próximo año se vislumbra de un nuevo modelo "más duro y restrictivo", apuntaron.

También dejaron claro a los alumnos que para superar el curso hay que alcanzar el 80% de los objetivos fijados tantos en las parcelas teórico y práctica, además de los seis meses de pasantería.

Por último, expresaron que, pese aunque todavía no ejercen, incorporarse al curso "ya obliga el secreto profesional como cualquier abogado de la profesión" y también hicieron hincapié en lo importante que es estar colegiado en el mundo de los letrados.