Francisco Jiménez, un cartagenero afectado por inhalación de amianto, ha estado declarando durante más de tres horas hoy en el proceso que se sigue contra 22 empresas estadounidenses que fabricaron materiales con los que trabajó en la antigua Bazán.

La declaración se ha efectuado por videoconferencia desde un salón del hotel Alfonso XIII, de Cartagena, debido a que por su estado de salud no podía desplazarse hasta tierras americanas. El testimonio de esta persona, a la que se ha diagnosticado un cáncer de pleura, ha marcado el inicio de un proceso que durará varios meses y en el que reclama unos quinientos mil euros a 22 sociedades por los daños sufridos.

El despacho de abogados Oria&Peña&Pajares y Asociados, que representa a Francisco Jiménez en colaboración con el bufete Senger&Weiss de Estados Unidos, ha contado con la presencia de una letrada española y un abogado norteamericano. "Actuamos contra cualquier empresa que utilice el amianto sabiendo que es cancerígeno", han expresado los letrados, quienes han estado acompañados por Diego Martínez Nieto, presidente de la Asociación de Personas Enfermas por Amianto (Apena), quien ha participado en la rueda de prensa posterior a la declaración de Francisco Jiménez, quien no ha comparecido por su delicado estado de salud.

Los letrados también han confirmado que se trata de la primera demanda judicial que se presenta con estas características.