El espectador imputado, junto con dos futbolistas juveniles, por un delito de Lesiones cometido hacia un árbitro, en la disputa de un partido de fútbol, negó ante el juez que hubiese propinado golpe alguno al colegiado y asegura que tampoco se observa que llevase a cabo esa acción en las grabaciones a vídeo del partido. El árbitro fue brutalmente agredido en el partido CD Mediterráneo-Real Murcia, de la Liga Nacional Juvenil, celebrado hace dos semanas.

El aficionado fue puesto a disposición judicial el pasado viernes, junto con dos futbolistas juveniles del CD Mediterráneo, y el juez decretó para los tres la libertad con el cargo de un delito de Lesiones y una orden de alejamiento de 300 metros hacia el árbitro, quien tuvo que ser ingresado por los golpes quien recibió en el transcurso del partido disputado en el campo de fútbol de la Urbanización Mediterráneo (Cartagena).

El espectador, quien está asesorado por el abogado Alfonso Ledo, aseguró a este diario que saltó al campo para intentar proteger al colegiado y rechazó ante el juez de Instrucción número 5 que diese algún golpe al árbitro, como le acusaron los árbitros auxiliares (jueces de línea), apoyando también sus manifestaciones en imágenes de una grabación en vídeo donde afirma que no se observa esa agresión que se le adjudica.

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El juez dicta una orden de alejamiento de los futbolistas del Mediterráneo hacia el árbitro