• Fueron 510 kilos los incautados por la Policía Nacional en una nave del polígono industrial Cabezo Beaza
• La coordinación de agentes de Cartagena, Málaga y Almería, junto a los GEO, ha sido clave en el éxito de la operación
• La ‘coca’ partió de Cali, hizo escala en Cartagena de Indias y Valencia, para llegar a la ciudad trimilenaria
• Las investigaciones sitúan al empresario cartagenero entre los que formaron una organización, mientras que se disipan las acusaciones hacia su empleado
• Los cuatro colombianos detenidos en la nave eran los encargados de custodiar el destino de la carga desde su origen

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El delegado del Gobierno en la Región de Murcia, José Joaquín Bascuñana, junto al comisario de Cartagena, Ignacio del Olmo, y responsables de las comisarías de Málaga y Almería, además de Murcia, ha protagonizado un encuentro con los medios de información cartageneros para informar “de lo que puede decir hasta ahora, pues el juzgado de Torrevieja ha decretado el secreto de las actuaciones y la operación sigue abierta”.

Es novedad que la cifra de arrestados ha aumentado hasta once personas, de edades comprendidas entre los 26 y los 54 años y con múltiples antecedentes por tráfico de drogas. Siete de ellos son de nacionalidad española y el resto de nacionalidad colombiana. Han ingresado en prisión por orden del Juzgado de Instrucción número dos de Torrevieja (Alicante). Entre ellos se encuentran dos cartageneros (un jefe y su empleado), que fueron apresados mientras almorzaban en una cafetería del polígono Cabezo Beaza. Hacia el empleado parece que cobra fuerza que no conocía la existencia de la droga, mientras que al jefe se le sitúa en la cúpula de la dirección del grupo. Se ha explicado que no es lo mismo un grupo criminal estable que otro que se organiza para un asunto concreto, como ha sido éste, en el que se sitúa al detenido en Baza (Granada), al empresario cartagenero y a un almeriense como los que decidieron crearlo, contactando con Colombia, desde donde partió el cargamento, que fue custodiado por cuatro colombianos, que eran los que se encontraban en la nave cuando se produjo el asalto de los GEO.

Los responsbles de las comisarías y el delegado del Gobierno viendo el vídeo de la operación

La droga incautada por la Policía Nacional alcanza un peso 510 kilos de cocaína de gran pureza, cuyo valor no se ha concretado, “pues depende del mercado y de cómo se distribuya”, han explicado. Sí han dicho que al ir ocultas en pieles de bovino se impedía, incluso, que fuesen localizadas por los perros especializados en asuntos antidroga.

De Cali a Cartagena
La investigación se inició hace un año cuando se seguía la pista de varios grupos dedicados al tráfico ilícito de estupefacientes asentados en Cartagena, Madrid, Granada y Almería. Los agentes detectaron, el pasado mes de diciembre, que los miembros de la organización estaban elevando sus medidas de seguridad para evitar ser detectados por la Policía y había indicios que alertaban de la posibilidad de que planeando la inminente introducción de una gran cantidad de cocaína procedente de Colombia.

Los investigadores constataron cómo los traficantes habían embarcado desde Cali, con escala en Cartagena de Indias, -ambas localidades de Colombia-, un contenedor con una carga legal de pieles de bovino, donde podría ir oculta la cocaína y cuyo destino final sería el puerto de Valencia (España). El contenedor fue sometido a un estricto control por los funcionarios policiales que comprobaron su descarga en el puerto valenciano y su traslado posterior, vía terrestre, a una nave situada en el polígono industrial Cabezo Beaza de Cartagena.

Los agentes del Grupo Especial de Operaciones de la Policía Nacional procedieron al asalto de la nave cuando se encontraban en su interior los responsables de red para extraer de las pieles la droga perfectamente oculta. Los agentes hallaron en la nave once palés de pieles de bovino ‘wet blue’ y, en su interior, 510 kilogramos de cocaína de gran pureza. Tras esta incautación, los investigadores procedieron a continuación a practicar dos registros domiciliarios en Olula del Río (Almería) y Baza (Granada).

La operación policial ha sido desarrollada por el Grupo de Estupefacientes de la Comisaría de Cartagena (Murcia), el Grupo 1º Estupefacientes de la  UDYCO Costa del Sol de la Comisaría Provincial de Málaga y la UDYCO de la Comisaría Provincial de Almería; en colaboración de especialistas del GEO y distintas Unidades de la Subdirección General de Logística.