Nació el 5 de junio de 1978 en Cartagena, es licenciado en Derecho por la Universidad de Murcia desde 2006 y ejerce la profesión desde octubre de 2006.

Jesús Giménez Gallo presenta su candidatura a decano del Colegio de Abogados con el objetivo de aportar a la institución "más transparencia y menos personalismos".

1. ¿Qué motivos le han llevado a aspirar al cargo de decano del Colegio de Abogados de Cartagena?
La verdad es que durante los últimos cuatro años he venido asistiendo al desarrollo de una forma de actuación, pública y privada, por parte de quien nos ha representado muy distinta de lo que pienso que debe ser un decano, teniendo en cuenta la alta estima en que tengo mi profesión y la dignidad que considero tenemos como profesionales, quizás porque lo que había conocido me llevó a esperar más de lo que en estos últimos años hemos proyectado.
Así que, cuando se produjo la convocatoria de elecciones y comprobé que no existía una alternativa, decidí presentarme como tal, a fin de tratar de cambiar esa sensación y de, en uso de la democracia, representar a esos compañeros que -como yo- son críticos con la labor efectuada, ambicionando que nuestra imagen pública y nuestro funcionamiento interno estén a la altura de los colegiados.
Además, desde ese día muchos compañeros me han trasladado su apoyo ante esta aventura, lo que me recuerda el orgullo que sentimos los que éramos junta directiva de la Agrupación de Jóvenes Abogados de Cartagena (AJAC) cuando conseguimos que el Colegio se dotara de un reglamento claro y ajustado a la norma de acceso al Turno de Oficio, aunque aquello nos supuso perder el apoyo que se nos había ofrecido. Y sin embargo la AJAC es hoy conducida por su presidente y junta directiva, la mayoría de ellos buenos amigos, además de compañeros, con gran acierto y ha conseguido los logros por los que iniciamos aquella andadura.
Y es que lo importante es que los profesionales nos sintamos amparados y tratados por igual en nuestro Colegio, que no deja de ser el que nos agrupa, sin que hasta que yo se existan categorías dentro del grupo.

2. ¿Qué le falta o sobra al Colegio?
Le falta, como he puesto de manifiesto, transparencia y le sobran personalismos.
La transparencia no es escribir todos los días en las redes sociales, es otra cosa, es que los colegiados podamos acceder en igualdad de condiciones a colaborar en grupos de trabajo del Colegio, tengamos acceso a los listados tales como los Turnos de Oficio, administrador concursal, mediador, contador-partidor, o que podamos también optar a los puestos de profesorado en la Escuela de Práctica Jurídica.
Y a día hoy sólo tenemos acceso en la web a parte de los listados del Turno, y desde la pasada semana, con posterioridad a que denunciara esta situación en otros medios, ya se nos ha circulado por el Colegio la posibilidad de inscribirnos en un listado de contador y otras especialidades, por lo que esta campaña ha dado más frutos en ese sentido que los últimos 4 años, y espero que sigan abriéndose el resto de cuestiones.
En cuanto al colectivo, señalar que cuando se es transparente es más sencillo que todos participemos, y que además creo que ese es el camino. Lo que sucede es que es muy complicado para algunos ser la voz crítica cuando se puede ser la cara amable y reclamar los focos para uno, y eso es lo que me gustaría cambiar.
En esa línea quiero poner de manifiesto que a raíz de la presentación de mi candidatura he tenido que soportar comportamientos inapropiados que lamento profundamente por parte de compañeros, y es que acepto el debate e incluso la animadversión, pero no la descalificación pública y gratuita, ni la pérdida de las más elementales normas de cortesía y trato profesional, menos aún de quienes tienen la obligación de servir a este colectivo.
Por si esto fuera poco, en mi condición de candidato se me ha entregado un censo de letrados sin teléfonos ni correos electrónicos, y el criterio del voto por correo, cuya interpretación solicité a finales de noviembre, cuando no se me permitió retirar las papeletas para que mis electores las remitieran por correo certificado (lo cuál parece ser que se hizo en anteriores elecciones), se me haya comunicado el 11 de diciembre, a falta de 9 días para las elecciones y después de requerirlo y que, parece ser, no es la misma situación que se desprende de las comunicaciones remitidas a los colegiados por el otro candidato.
Esto refuerza que en el Colegio ha venido faltando la idea del colectivo y la igualdad de oportunidades, pero sobre todo me llama la atención la gran algarabía que ha producido el hecho de que reclame la publicidad de las listas y el mismo trato para todos, pues creo que eso es lo mínimo que debíamos tener.

3. ¿Y qué le puede aportar usted que actualmente no tenga?
Pues precisamente eso, una idea colectiva de la profesión, sin personalismos ni populismo.
Desde que me inicié en la profesión he compartido despacho con excelentes profesionales y mejores personas, y siempre nos servimos de apoyo y cobertura, sin que ninguno nos preocupemos de brillar más que el otro, sino buscando el objetivo común.
Por eso creo firmemente en la Junta de Gobierno como órgano colegiado, pero también en la formación de comisiones, grupos de trabajo, áreas delegadas o cualesquiera sistemas permitan la participación de los colegiados y el conocimiento de la actividad colegial. De hecho esta misma mañana lo he comentado con una compañera que también presenta su candidatura en estas elecciones y que, como yo, se integra en alguna de ellas.
Como colegiado aún me chirría el 20 de noviembre de 2012 saliera en los medios locales la noticia de que no existen quejas por retrasos en los procedimientos y vistas, y que existiendo éstos, no existiera una contestación directa por parte de nuestro decano, que es quien debe velar porque un compañero no aparezca señalado. A estas cuestiones me refiero cuando hablo de personalismos impropios y falta de defensa al colectivo.

4. ¿Quién está detrás de esta candidatura?
Puedo decir que muchos amigos y compañeros, y además un convencimiento, creo que mayoritario entre los colegiados, de que hay que impulsar otra vía, para ser el Colegio de todos los Abogados de Cartagena y el resto de ciudades a las que damos servicio, proyectar una imagen de unión y fuerza desde la Junta de Gobierno hacia el exterior. Pensamos que lo importante no es quien gane, sino el cómo se desenvuelva en la victoria.

5. ¿Hay que seguir defendiendo la Justicia en Cartagena de las decisiones de Madrid?
Por supuesto que hay que seguir defendiendo la Justicia, pero el Colegio debe defender también a sus colegiados, con especial incidencia en nuestra profesión, pues somos un Colegio profesional, no una plataforma.


Otros datos de su trayectoria:

- Casado, padre de dos hijos.
- En la actualidad es socio de dos despachos: Pérez Pardo Abogados, en el que viene prestando sus servicios profesionales desde hace más de treinta años, y Domus Propiedad Horizontal, despacho especializado que inició su labor hace poco más de dos años.
- Colegiado en Ilustre Colegio de Abogados de Cartagena desde octubre de 2006, misma fecha en que me incorporo a Pérez Pardo Abogados
- Curso General para Abogados de la Escuela de Práctica Jurídica San Isidoro de Cartagena 2005-2006.
- Prueba de Capacitación Profesional para la abogacía en 2007
- Cursos de Doctorado en Derecho Civil en la Universidad de Murcia 2007/2008.
- Incorporado al Turno de Oficio en el año 2009.
- Tutor Externo de estudiantes de Derecho de la Universidad de Murcia y la Universidad Católica San Antonio de Murcia, así como estudiantes del Instituto Carlos III de Cartagena.
- Experto en mediación titulado en el año 2013
- Realizando en la actualidad curso de especialización en arbitraje.
- Vicepresidente de la Agrupación de Jóvenes Abogados de Cartagena desde 2009 a 2012.
- Cursados 2 años de la licenciatura en periodismo en la Complutense de Madrid.