Taponar las arquetas con tortas de cemento es la medida que está aplicando la concejalía de Infraestructuras del ayuntamiento de Cartagena para tratar de evitar que sus diferentes poblaciones sufran el robo de cables, que provoca apagones del alumbrado público.
El robo de cableado está azotando, se podría decir, a todos los ayuntamientos de España, muchos de los cuales comienza a tomar medidas, además de aumentar la vigilancia, con el objetivo de frenar esa acción de los vándalos que buscan ingresos vendiendo el cobre de los mismos. Si en Valencia ayer se conocía que a los cables se les echa un spray que permite identificarlos en el lugar donde se adquieran, en Cartagena se ha optado por tratar de evitar el robo desde el principio y cubrir las arquetas metálicas con tortas de cemento, lo que complica la apertura de las mismas y la extracción del cableado.
Numerosas poblaciones cartageneras han sufrido estos robos y apagones del alumbrado público. Estas noticias publicadas son algunos ejemplos:
Comercios y semáforos alumbran la vía principal de Los Dolores
Detenido en El Algar por robar maquinaria y cable de cobre de una fábrica
Apagón en Los Alcázares por un robo de cables
Piden la colaboración de los vecinos para acabar con los robos del cableado en Alumbres
Detienen a dos personas que dejaron once calles de El Carmolí sin luz
Sorprenden a cuatro personas que robaban cable de cobre en Islas Menores
A estos se une Molino Derribao, donde robaron el cableado hace ocho meses (fue denunciado ante la Guardia Civil y al entrada al pueblo está a oscuras desde entonces.
La concejalía de Infraestructuras de Cartagena, que encabeza el edil Francisco Espejo, tamibén va a llevar de forma paralela la actuación de reponer el cableado sustraído, para lo que se ha ampliado hasta 250.000 euros, según hemos podido conocer, el dinero destinado a esta labor.
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