Los dueños de una finca de Pozo Estrecho consiguieron localizar una furgoneta que le habían robado gracias al rastro de aceite que dejó el vehículo, que apareció en Los Martínez del Puerto.
Se dieron cuenta que les habían robado la furgoneta de reparto, pero también que, al parecer, al salir el vehículo golpeó contra un objeto y se rompió el carter, con lo que iba perdiendo aceite. Los responsables de esta empresa siguieron el rastro, que les llevó hasta Balsicas, donde las señales apuntaban que habían echado de ese líquido que perdían. Luego el rastro les llevó hacia la autovía hacia Murcia, desapareciendo a la altura de los Martínez del Puerto. Presentaron denuncia en la Guardia Civil, informándoles de su investigación, y la furgoneta apareció días después. Eso sí, le faltaban la batería eléctrica, ruedas y algunas piezas más.