Rafael Cañete Andreu ha sido el encargado de dedicar unas palabras sobre la que será su profesión, en representación de todos los nuevos letrados que esta mañana han jurado su cargo, haciendo un recorrido por toda su vida, desde que se plantearon dedicarse a la abogacía hasta el día de hoy.

Muchos por vocación, muchos por las películas de juicios americanas y otros por seguir la estela familiar, todos tienen una razón por la que han decidido dedicarse a la abogacía, una profesión dura pero muy satisfactoria para quien realmente la sienta. Una ardua tarea les toca ahora a los nuevos letrados, y es hacerse un hueco entre todos los demás. Todo ello es lo que el representante de los nuevos letrados, Rafael Cañete, ha querido resaltar en su discurso. “Ahora toca luchar, trabajar y buscar la justicia con sinceridad, pero para ello se necesita confianza y fe”, decía. “Hoy es el comienzo de nuestra vida profesional y a partir de este momento ya somos ‘colegas’, añadió en un oratorio salpicado de notas de humor.