Los hechos transcurrieron a la salida de un bar de la calle Príncipe de Asturias, y tras la detención del individuo por la Policía Local, tanto el agredido como el agresor tuvieron que ser atendidos en el Rosell.

La Policía Local procedió el miércoles por la noche a la detención de un individuo de origen rumano, por agresión con arma blanca a un compatriota con el que había estado tomando copas en un local de la calle Jiménez de la Espada.

Según declaró más tarde el agredido a los agentes, al salir del bar su amigo le había manifestado su intención de pasar esa noche en los calabozos, a lo que le respondió que mejor se fuera a casa y no buscara problemas.

Fue entonces cuando el primero, que se disponía a entrar en el portón de su domicilio, sintió un fuerte pinchazo en la parte trasera del cuello y varios en el resto del cuerpo, por lo que se giró para defenderse del ataque y al intentar quitarle la navaja que llevaba el segundo, se produjo un corte en la mano.

Con la descripción facilitada por el herido, varias unidades de servicio de la Policía Local comenzaron la búsqueda del agresor, que finalmente hizo acto de presencia esgrimiendo una navaja manchada de sangre y gritando insultos hacia su compatriota.

Tanto el agresor, cuya actitud violenta le llevó a golpear el interior del vehículo policial, como el agredido tuvieron que ser trasladados para ser atendidos en el Rosell. Al detenido se le intervino una navaja de 13 centímetros de longitud.