La ausencia de un testigo importante ha impedido que esta mañana se celebrarse el juicio contra dos acusados de propinar una paliza a un joven en el polígono Cabezo Beaza (Cartagena), quien ha perdido la visibilidad de un ojo. La vista se ha fijado para el 3 de febrero.

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¿Paliza o pelea?

Suspendido el juicio por una causa en la que la víctima perdió la visión de un ojo

El juicio ha levantado una gran expectación, pues además de los nueve testigos, decenas de personas han acudido esta mañana a la sala de vistas de la Audiencia Provincial. Sin embargo, faltaban dos testigos importantes. Por un lado, la chica que, al parecer, fue el involuntario motivo del inicio del incidente por un asunto de celos. A esta persona se la ha localizado y no ha puesto problemas para ir a los juzgados. Sin embargo, con el vigilante de seguridad de una discoteca próxima a donde se produjo la pelea, y que intervino para pacificar la situación, no ha sucedido lo mismo debido a que su esposa sufrió ayer un accidente de tráfico.

Ante esta situación, tanto la Fiscalía (Verónica Celdrán), la acusación particular (Antonio Navarro Selfa) y los abogados de las defensas (César Delicado y Juan Francisco Pérez Avilés) han coincidido en considerar importante su testimonio, por lo que el juicio no se ha podido celebrar.

El tribunal, integrado por Fernando Fernández-Espinar, Matías Soria y Beatriz Carrillo, ha suspendido la vista y la ha señalado para el próximo 3 de febrero.