Dándome hoy mi paseo habitual de las tardes en mi gran amado pueblo de Los Urrutias, he sido testigo de una barbaridad de la cual doy fe. Desde el desgraciado temporal que sufrimos a primeros de diciembre en las instalaciones deportivas urrutienses, hubo unos problemillas que impedían a los poquitos críos que nos quedan en el pueblo jugar al fútbol y que mi gran amigo y amante del fútbol ya público en este mismo medio de información, José Antonio Martinez Mellinas.

Simplemente quiero dar la enhorabuena a las autoridades responsables de dicho estado de las instalaciones a fecha de hoy que siguen sin solucionarse, llámense alcalde de Cartagena, concejal de deportes, Club Deportivo Los Urrutias, Asociación de Vecinos de Los Urrutias… o, desde mi ignorancia, a quien corresponda la responsabilidad de arreglar dichas instalaciones. Eso sí, las rifas familiares de los sábados y las partidas del club social las seguimos te teniendo gracias a dios. Eso sí, expresar mi gratitud a la empresa que en su día nos pudiera esa portería, que gracias a ella ha evitado males mayores.