Asistíamos el pasado lunes, día 9 de marzo, a unas espectaculares declaraciones de Agustín Guillen sobre la comparecencia de Pilar Barreiro (‘La Regidora’) en el Tribunal Supremo. “O rectifica o largo”. Es decir, el que fuera vicealcalde y mano derecha de la alcaldesa durante 15 años, le pedía que reconozca que ha mentido en el Supremo o se atuviera a las consecuencias. Sin embargo, eso era imposible de cumplir por Barreiro, pues sería su harakiri político ya que ¿cómo una diputada y alcaldesa durante 20 años va a mentir en el Tribunal Supremo?.

El órdago de Agustín Guillen, otrora casi ‘alter ego’ de ‘La Regidora’ era muy fuerte, y en teoría sin riesgos, porque más tiene que perder ella. Los titulares periodísticos de ‘crisis en el PP’, ‘fuerte debate interno’, etcétera, provocaron un terremoto en el partido. Pero en 24 horas todo ha quedado en agua de borrajas, y Agustín ha dado marcha atrás asegurando que “las explicaciones han sido suficientes”. Que gran poder de convicción tiene ‘La Regidora’.

El problema, Agustín, es que tenemos las declaraciones por escrito y te ha echado las culpas a ti, como responsable de Urbanismo, es decir que te comes el marrón. O Barreiro ha mentido en el Tribunal Supremo o en el resumen escrito de la declaración se ha falseado la verdad, es decir ha mentido la Secretaria de la Sala y la Regidora lo ha dado por bueno.

Agustín, ¿por qué no largas?