Considerado Sr. Arcadi, porque es lo que voy a tener con usted, consideración. Soy abuela de un chico de 14 años con síndrome de Down, que no es una enfermedad por si no lo sabe es una alteración por la presencia de una copia del cromosoma 21.

Que usted hable que es una inmoralidad tener un hijo con síndrome de Down, que pena, no sabe lo que se pierde, estoy segura que cambiaría de opinión, estos niños nacen con los mejores valores de la vida aprendidos. Querido Rafael (padre de Nicolás) ¡Enhorabuena! Por su intervención, a mi nieto también le gusta la tortilla, pasear en los columpios, jugar con sus dos hermanos, estar con su abuela cantando, tal vez no hará un problema de matemáticas o quizás necesite más tiempo, a mi me preocupa que sea feliz y tenga sus derechos  como ciudadano y usted Sr. Arcadi no se los va a quitar, ya lucharía está abuela con todas sus fuerzas, no lo dude!

¿Un crimen contra la humanidad tener un hijo con síndrome de Down? mi nieto me ha hecho fuerte ante estos comentarios. Usted es el que no tiene una mínima consideración. Ellos son auténticos, generosos, su bondad y ternura la reflejan en sus caras todos los días, con la mejor de sus sonrisas, Sr. Arcadi desde este humilde escrito no olvide que todos tenemos alguna discapacidad, nadie es perfecto.

Con mis mejores deseos de que algún día cambie de opinión. Una abuela feliz con un nieto con síndrome de Down.