"¿Me dejas tu móvil para llamar?". La petición es de lo más usual y casi todos la hemos escuchado alguna vez, pero nadie se imagina que aceptar le pueda llevar ante el juez. Es lo que parece ser que le ha sucedido al policía de la Autoridad Portuaria que fue detenido en la gran operación contra el tráfico de droga que ha llevado a cabo esta semana la UCO (Unidad Central Operativa) de la Guardia Civil, con un balance de veinte arrestados. El policía portuaria, que ha quedado en libertad con cargos al estimar el juez que los indicios son "débiles", explicó ante el titular del juzgado de Instrucción número 5 de Cartagena que el agente de la Guardia Civil inculpado, que trabajaba en la misma zona portuaria que él, le pedía continuamente el teléfono móvil para llamar alegando que no tenía saldo con el suyo o que no lo llevaba encima. También expuso que le decía en ocasiones que utilizase el teléfono de la empresa, pero esa opción la rechazaba el agente.